Ten en cuenta estos factores antes de contratar Internet en tu casa

Parece increíble que lo que comenzó como la conexión entre ordenadores hace ya décadas, hoy se haya convertido en uno de los motores que mueve el mundo. Pero la realidad es que Internet llegó para quedarse y cambió la sociedad de forma paradigmática.

Por esta razón, contar con una conexión de calidad en nuestras viviendas es un requisito social en toda regla, y gracias a las diferentes compañías, podemos encontrar aquella opción que más se ajuste a nuestras necesidades particulares.

¿ADSL o fibra óptica?

Uno de los mayores puntos de debate en los últimos años es la elección entre fibra óptica o ADSL en cuanto al internet en casa . Dependiendo de lo qué se escoja, tendremos un tipo de conexión u otra, por lo que es el principal punto a tener en cuenta antes de escoger la tarifa final.

Con el ADSL, la principal ventaja con la que contamos es la cantidad de hogares que pueden cubrirse. Un mayor rango de cobertura que, sin embargo, pierde en cuanto a su velocidad de subida de datos.

La fibra óptica se posicionó rápidamente como la opción ideal entre millones de clientes en todo el mundo gracias a la rápida velocidad que llega a alcanzar. Es decir, pongamos que contratas 50Mb en tu tarifa. Con el ADSL, dependiendo de la distancia con la central, tú alcanzarás una velocidad real inferior a la contratada; en cambio, la fibra óptica asegura que lo contratado sea lo que disfrutas. No obstante, no todas las zonas pueden acceder a este tipo de línea.

En relación con esto, existe también la fibra simétrica, un tipo de conexión que a diferencia de las anteriores, asegura también la velocidad de subida. Algo fundamental en una época donde el almacenamiento online mediante la nube es una de las mayores ventajas.

Por esta razón, antes de escoger una tarifa de internet, tendremos que analizar nuestra vivienda. Si no podemos acceder a la fibra óptica, el ADSL es nuestra mejor opción.

Una vez identificado esto, sólo nos quedará escoger la velocidad deseada. Para los más conformistas, 100Mb de fibra simétrica serán más que suficientes. Pero si, por otro lado, eres de aquellos que les gusta pasar horas y horas navegando, te recomendamos que escojas tarifas de unos 600Mb.

Contrata también tu teléfono fijo

De cara a tener un hogar cubierto de necesidades tecnológicas, las compañías lanzan al mercado ofertas que combinan la tarifa de internet con la del teléfono fijo. Esto se ha convertido en una obligación por parte de las empresas y corre de nuestra cuenta que se incluyan en el pack.

Sin lugar a dudas, con el auge de los smartphones, la telefonía fija ha pasado a un segundo puesto. No obstante, por mucho que esto sea así, es casi una necesidad tener un teléfono en las viviendas al que acceder sin necesidad de baterías o demás parafernalias.

Por esta razón, cuando contrates una tarifa de internet para el hogar ten en cuenta las condiciones para tu fijo, como llamadas gratis entre fijos o bastantes minutos para las llamadas a móviles, que son requisitos mínimos en cualquier empresa. Eso sí, con los aparatos y la instalación necesarias, siempre gratuitos.

No bastante, son muchas las compañías que tratan de conseguir que el cliente quede totalmente cubierto en las diferentes necesidades, por lo que ofrecen también combinaciones con la línea telefónica particular, consiguiendo un ahorro considerable en tu factura mensual.

Estate atento a las promociones

Una vez reconocida la conexión que buscas y haber tenido en cuenta las combinaciones en las tarifas, sólo queda encontrar aquella compañía que más te llame la atención desde un primer momento.

De cara a cumplir con esto, las empresas lanzan ofertas y promociones al mercado que buscan captar clientes. ¿Lo mejor de todo? Que somos nosotros los principales beneficiarios de estas ofertas.

Podemos acceder a la mejor de las conexiones a Internet por un precio mucho menor si somos capaces de buscar bien. La fidelidad de los contratantes es el principal objetivo de las compañías y corre de nuestra cuenta encontrar aquella que satisfaga todas y cada una de nuestras necesidades.