“Todo animal que convive con una persona tiene información que transmitir para mejorar la calidad de vida de ambas partes”, dice Eva Sánchez, experta en Comunicación y Mediumnidad con animales; “Comunicarnos con ellos es una habilidad que todos tenemos”.
“Vivimos con nuestros compañeros animales y deberíamos saber lo que nos dicen con su comportamiento, a través de las enfermedades que desarrollan”, dice esta coach, que experimentó en primera persona el mensaje de su perra Troya: “Por entonces percibía todo desde el miedo y el juicio, por lo que me costaba entender que un animal me diera un mensaje”.
Troya, a través de su enfermedad, hizo que Eva se diera cuenta de que estaba en una relación tóxica de la que no sabía cómo salir; “Ella me dio los pasos para hacerlo”.
Eva Sánchez reconoce que se trata de situaciones que, muchas veces, son dolorosas, “sin embargo, si deseamos entender sus mensajes, debemos agradecer su conexión”.
El lenguaje corporal, las imágenes mentales o telepatía, las actitudes, las relaciones con otros, la energía y las vocalizaciones son las herramientas de las que se valen los animales para conectar con los humanos con quienes conviven. De hecho, según la citada experta, “ellos son almas avanzadas y quienes nos dan permiso para la comunicación”.
“Los animales leen telepáticamente nuestra energía, nuestra intención y nuestra emocionalidad”, dice Verónica Kenigstein, de la Escuela Internacional de Comunicación Interespecies; “no podemos mentirles porque sienten nuestro miedo, nuestra alegría, la frustración, la rabia o el amor”.
“Ellos pueden recibir nuestras imágenes mentales con claridad, con o sin nuestra conciencia, por eso es mejor reconocerlas, para encontrar sintonía y coherencia”, dice Kenigstein, para quien el respeto es fundamental en la comunicación: “los conceptos que recibimos pueden ser imágenes, frases, palabras o sensaciones corporales tal y como ellos las perciben”; “También podemos traducirlas con nuestras palabras, en función de lo esencial del mensaje”; “Mientras más respetemos y validemos sus percepciones, mientras más los integremos a nuestras vidas y les demos su lugar, más fácil será la comunicación”.
“En una comunicación con los animales trabajamos el beneficio de ambas partes”, dice Eva Sánchez; “cuanto mejor esté la persona, mejor estará el animal”.
Estos procesos requieren de un propósito, que responde a la cuestión de ¿para qué comunicarse con los animales con quienes convivimos? La experta Verónica Kenigstein distingue entre los siguientes motivos:
La intención implícita en la comunicación con animales puede mejorar diversos niveles, según Kenigstein, tales como la experiencia individual del animal (al conocer sus preferencias, sentimientos, gustos y sensaciones), la vinculación con y del humano o también en el ámbito espiritual: “los aprendizajes que podemos hacer gracias a la presencia del animal en nuestras vidas; la manera de manifestar la misión espiritual que trajo en la encarnación y ayudarnos en la nuestra”.
“Al fijarnos en sus conductas, podemos darnos cuenta de cosas nuestras, aunque no nos gusten”, dice Eva Sánchez; “en este sentido, recibiremos lo que requiramos, aunque no sea lo que deseemos”.
¿Cómo comunicarse con los animales? Verónica Kenigstein distingue varias fases en dicho proceso:
El procedimiento para enviar el mensaje al animal consiste en visualizar algo, es decir, crear la imagen mental de lo que se desea comunicar. Lograr luego su atención, asegurarse de que recibió el mensaje mirándolo o saludándolo. Por último, unir palabras e imágenes mentalmente.
“Esta habilidad requiere entrenamiento”, dice Eva Sánchez, quien nos propone un ejercicio de escritura mental automática: “Imagina el animal al que le haces la pregunta, por ejemplo, a quién has de perdonar; el primer rostro o figura que te llegue es la respuesta”.
Para los más avezados hay preguntas más poderosas: ¿Qué me dice mi compañero animal acerca de cuál es el propósito de mi vida?, ¿cuál es mi principal bloqueo?, ¿por qué repito patrón con la pareja? o también ¿cómo puedo verlo de otra forma?
“Los mensajes que transmitimos a los animales han de ser claros”, dice Verónica Kenigstein, de la Escuela de Comunicación Interespecies; “Depende mucho de nosotros, los humanos, reducir la posibilidad de malentendidos, sobre todo por la falta de coherencia entre lo que pensamos, sentimos, decimos y hacemos”.
¡Felices Charlas Interespecies! ¡Feliz Coaching!
Si eres amante de la coctelería, atrévete con esta creación, Cool&Hot, que hoy nos propone…
¿Cómo va hasta ahora tu vida? ¿Estás experimentando la vida que deseas? ¿Qué es lo…
La directora general, Lourdes Rivera, dedicó el galardón a todos los trabajadores y trabajadoras de…
Las curvas sombreadas por un lápiz de dos cuerpos en papel nacidos de la…
En el programa de hoy hablamos de la huelga indefinida de los trabajadores del Servicio…
China Taste, el evento dedicado a celebrar la riqueza de la gastronomía tradicional china, regresa…