En España se estima que unos 260.000 pacientes viven con cáncer de próstata. Según el informe Cifras del cáncer en España de la Sociedad Española de Oncología Médica, SEOM, es el primer tumor en incidencia y el tercero en mortalidad en varones. Para 2021 se prevén 35.764 nuevos diagnósticos de cáncer de próstata, lo que supone 154 casos por cada 100.000 hombres, en comparación con los 138 casos por cada 100.000 mujeres que se estima para el cáncer de mama -su homólogo en cuanto a prevalencia y afección en un solo sexo-. Sin embargo, a pesar de ser el tumor más frecuente en hombres, es uno de los menos conocidos y está escasamente representado en las políticas públicas y en los planes oncológicos de las comunidades autónomas.
Además, existe un importante estigma social para los pacientes por los problemas derivados de la enfermedad y su vínculo con la imagen de virilidad, que es necesario abordar mediante una mayor visibilidad y concienciación de esta enfermedad. Por este motivo, y con el objetivo de difundir los retos del abordaje del cáncer de próstata, exponer la visión del paciente y abrir un espacio de reflexión acerca de esta patología y el impulso que se pueda prestar desde las instituciones parlamentarias, la Asociación de Pacientes con Cáncer de Próstata, ANCAP, ha organizado la jornada Hablemos de cáncer de próstata, que ha tenido lugar en el Senado, coincidiendo con la semana en la que se conmemora el Día Mundial de la lucha contra el Cáncer de Próstata (17 de noviembre).
El presidente de ANCAP, Antonio Prieto, ha recalcado que el esfuerzo en la lucha contra el cáncer de próstata «debe llevarse a cabo en estrecha colaboración con las asociaciones de pacientes, las sociedades científicas, y los gobiernos de las Comunidades Autónomas. Y ha animado a incorporar estas prioridades en sus estrategias dirigidas a la atención de los pacientes con cáncer de próstata:
- Fomentar la implementación de programas de prevención y control del cáncer de próstata en los planes de salud (estilos vida, cribado en población de riesgo y diagnóstico precoz).
- Optimización de los procesos asistenciales de cáncer de próstata a través de un abordaje multidisciplinar y de la implementación de vías rápidas para enfermedad avanzada, con la incorporación permanente de las buenas prácticas que se desarrollaron durante los meses de pandemia, como las consultas remotas.
- Promover campañas educacionales para combatir el estigma que sufren los pacientes con cáncer de próstata, promoviendo el cambio de actitudes sociales y la comunicación responsable.
- Incrementar la inversión y recursos para favorecer la investigación de los grupos multidisciplinares en cáncer de próstata.
- Poner el foco en las inequidades de acceso de los pacientes con cáncer de próstata a los tratamientos y métodos quirúrgicos y diagnósticos entre comunidades autónomas.