Bajo el nombre de SoledadES, se ha presentado en Madrid el Observatorio Estatal de la Soledad no Deseada, una entidad que se conforma con espacio de intercambio de investigaciones y conocimientos entre administraciones y profesionales, con un objetivo claro: conocer la dimensión del aislamiento involuntario en que viven muchas personas en España y contribuir después a su mejora.
La creación del observatorio es una iniciativa de Fundación ONCE en colaboración con Cruz Roja, ONCE, Red contra la Soledad no deseada, Federación Española de Municipios y provincias (FEMP), Plataforma del Tercer Sector, Plataforma del Voluntariado, Red de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social, Consejo de la Juventud de España, UGT, CCOO, CERMI y Plataforma de Organizaciones de Pacientes. Todas estas entidades forman parte del Comité Consultivo del observatorio, el órgano de encuentro y trabajo que marca la agenda y sirve para impulsar sus planes y acciones.
Una realidad constatable
La presidenta del Observatorio, Matilde Fernández, ha señalado que pese a que la sociedad siente que la soledad no deseada es un problema cada vez mayor, hay poca información al respecto, lo que ha llevado a las entidades promotoras a la creación del Observatorio y a impulsar un estudio sobre esta realidad.
Tal y como desgranó Fernández, los datos preliminares del trabajo llevado a cabo por SoledadES señalan que un 92,9% de españoles creen que la soledad es un problema social bastante o muy importante.
En la misma línea, el 82,3% de entrevistados consideran que el problema es “cada vez más importante” y a dos de cada tres les gustaría poder actuar para combatir la soledad de personas en su entorno (66,6%).
En este sentido, un 72,5% piensa que luchar contra la soledad no deseada debe ser una cuestión prioritaria para las administraciones y más de un 50% les atribuye la función de velar porque nadie se sienta solo.
En concreto, un 27,5% de encuestados señala al Gobierno central con sus políticas estatales como el principal responsable de evitar la soledad no deseada; el 19,7% cree que son los ayuntamientos los que tienen que trabajar por evitar esta situación, y un 5,6% atribuye ese papel a las comunidades autónomas.
En cuanto a la responsabilidad social, un 40,9% sostiene que debe ser la ciudadanía la que se preocupe por evitar la soledad no deseada; un 4,1% deja esta responsabilidad en manos de las ONG, y un 2,2% en las políticas de RSC de las empresas.